El mundo está hecho de luces y sombras, como la fotografía. Es posible que escribir unas líneas diluyan el sentimiento que me embarga, el temor por que las sombras estén invadiendo el mundo. Me gustaría albergar alguna esperanza y volver a sentir la ingenuidad de lo utópico recuperando la luz, porque sin ella la fotografía es imposible. Tengo que comprarme unas gafas para eliminar los reflejos que no me dejan ver que la realidad está aquí, delante de mis narices.